María Yagüe Solís / SEGOVIA
También reivindican la mejora e la pavimentación de sus calles, la limpieza de los restos de la última crecida del Río Eresma y el aumento de la frecuencia de las paradas del autobús urbano.
La Asociación de Vecinos del barrio de San Marcos ha transmitido al Grupo Municipal Popular (GMP) las principales preocupaciones que les acechan como barrio, en una reunión mantenida con Jesús Postigo, portavoz del GMP y otros concejales populares.
La principal preocupación es el estado de deterioro del Fielato de San Marcos, que alberga, hoy por hoy, la sede de la asociación. Este edificio histórico y singular, presenta importantes deficiencias estructurales. Su arreglo y acondicionamiento permitiría la conservación del último Fielato que existe en Segovia.
Los populares señalan que arreglar la cubierta supondría una inversión en torno a los 26.000€ según recoge un informe que ya remitieron a Alcaldía hace unos meses. Pero, a día de hoy, los vecinos todavía no han recibido la visita de los técnicos municipales.
Otros asuntos que preocupa a esta vecindad tienen que ver con los restos sin recoger de la última crecida del Río Eresma en el entorno del colector de San Marcos. Los vecinos temen que de subir de nuevo el nivel del agua podría ocasionar problemas.
Durante la reunión, también se habló de los autobuses urbanos que pasan por el barrio ya que les gustaría que aumentara la frecuencia de las paradas, consensuando siempre esta petición, por supuesto, con la Asociación de Vecinos de Zamarramala.
El arreglo del emborrillado junto al Arco de la Fuencisla, la mejora de la iluminación en esta zona y el arreglo del pavimento de muchas de las calles del barrio, deteriorado por las obras realizadas por las acometidas de luz, gas y telefonía, son otras de las demandas planteadas desde la Asociación de Vecinos de San Marcos.