Marta de Pablos / SEGOVIA
Según el Instituto Nacional de Estadística, el Índice de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA) registra en el primer trimestre de 2014 una ligera subida del 0,8% respecto al cuarto trimestre de 2013. Es decir, la confianza aumenta levemente en términos generales pero no lo suficiente a pesar de la insistencia del Gobierno de que todo va a buen ritmo.
En cuanto a las Expectativas empresariales en general, para el I trimestre del nuevo año continúan siendo igual de negativas que en el trimestre anterior. Sin embargo, se reduce un 1,5% la confianza entre los autónomos y microempresas (menos de 10 trabajadores).
Por tamaño de establecimiento; a menor tamaño menos confianza. Las peores expectativas se dan en los de menos de 10 trabajadores (autónomos y microempresas) donde el saldo es de -42,7 puntos porcentuales (optimistas 7,6%; pesimistas 50,3%), mejorando ese saldo de manera progresiva en función del tamaño hasta llegar a los establecimientos de más de 1.000 trabajadores donde el saldo de las expectativas es de -4,5% (optimistas 15,9%; pesimistas 20,4%).
María José Landaburu, Secretaria General de UATAE, ha destacado que es evidente que las expectativas y confianza de los empresarios, especialmente de los autónomos y microempresas, no coinciden con el mensaje de mejora y confianza que insistentemente traslada el Gobierno de España; su realidad es otra, e incluso entre los pequeños la confianza y expectativas es más negativa que en el trimestre anterior.
Para Landaburu, es necesario que bancos y poderes públicos también confíen en los autónomos. Así habrá más personas dispuestas a emprender y se sentarán las bases para el crecimiento y la creación de empleo.