Marta de Pablos / SEGOVIA
Tras la sustitución de redes en el tramo entre las calles Muerte y Vida y Pintor Montalvo, comienzan los primeros trabajos de pavimentación. Las obras de reurbanización tienen un plazo de ejecución de 8 meses.
La calle empieza a cambiar la imagen. Tras la sustitución de las viejas conducciones entre la calle Muerte y Vida e Hilanderas por una tubería de PVC corrugado, las acometidas domiciliarias cuentan con nuevo soporte.
Además se han introducido las canalizaciones de las compañías suministradoras (energía eléctrica, telefonía, fibra óptica y gas natural). Y ya se trabaja en el tramo entre la calle Hilanderas y San Francisco donde se están colocando las conducciones.
A la vez que avanzan las obras y tras hormigonar la superficie de la calle Muerte y Vida, han comenzado a pavimentar, colocando las nuevas losas de granito en las aceras.
Mientras se llevan a cabo estas obras, la calle permanece cerrada al tráfico, pero está abierta a los peatones que en momentos puntuales deben esperar a que las máquinas maniobren.
Cuando finalicen las obras en la calle Muerte y Vida la calzada contará con un carril, con una banda de aparcamiento en línea en el lado izquierdo de la vía en el sentido de circulación. Entre la acera y la calzada, que quedarán al mismo nivel, se ha colocado un bordillo de granito.
Finalizada la primera fase, se acometerá la segunda en el tramo peatonal, entre el Azoguejo y la calle Pintor Montalvo, donde se utilizarán losas al estilo del pavimento de la Calle Real, prolongando así el eje comercial más allá del Azoguejo.
El proyecto de reurbanización integral tiene un presupuesto de 341.434 euros y un plazo de ejecución de 8 meses por lo que se espera que finalicen en verano.