María Yagüe Solís / SEGOVIA
Los vecinos temen que tanto los olores como los vertidos de la Planta de Compostaje deriven en un problema de salud pública que se extienda por toda la Tierra de Pinares. IU-Equo y Podemos han presentado de forma conjunta una Propuesta No de Ley pidiendo la retirada de las autorizaciones otorgadas a la empresa.
El problema no es nuevo, hace cinco años que Ecologistas en Acción presentó la primera denuncia por los insoportables olores que emanan de la Planta de Compostaje de Fuentepelayo.
Los vecinos dicen estar desesperados, y aunque nadie se atreve a presentar una denuncia a nivel particular han tomado la iniciativa de crear la Plataforma No más Mierda. Desde esta Plataforma han manifestado su gran temor: que los residuos que vierten los camiones por la zona deriven en un verdadero problema de salud pública
AUDIO.- José Luis Ordónez, presidente de la Plataforma NO más Mierda
Aunque la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Segovia, afirma que todo está en orden, la preocupación de los vecinos va más allá. Creen que hay razones para valorar la existencia de un negocio oculto, detrás de la planta. Y, es que aseguran que llegan más camiones de noche que de día, hay vigilancia en las carreteras y los camiones cisterna vuelven a salir llenos de la planta. Es después, cuando reparten residuos por varias tierras de la zona, haciendo montones que, dicen no ser orgánicos.
AUDIO.- José Luis Ordónez, presidente de la Plataforma NO más Mierda
Se pregunta dónde están los agentes medioambientales de la Junta para hacer los estudios necesarios, porque ellos, carecen de los medios que requiere la situación.
AUDIO.- José Luis Ordónez, presidente de la Plantaforma NO más Mierda
Sus quejas y protestas han recibido la respuesta de Izquierda Unida y Podemos que han presentado una Propuesta No de Ley en las Cortes de Castilla y León, en la que piden:
- la retirada de las autorizaciones otorgadas a la empresa.
- la revisión del pago de la subvención de 190.100 euros a la empresa para comprobar el cumplimiento de los requisitos de salubridad de la misma
- la elaboración de tres informes: uno para conocer los riesgos para la salud que derivan de las prácticas de la planta; otro sobre los riesgos para las personas que allí trabajan; y, otro para saber el daño causado al turismo de la zona.